Comer frutas y verduras debería ser una prioridad en una dieta equilibrada. Constituyen, junto con las legumbres, el conjunto de alimentos con menor preparación y cantidad de elementos añadidos en estado natural – como conservantes y colorantes-,  que pueden ingerirse crudos en su mayoría y que, por tanto, mantienen todas sus propiedades alimenticias.

Las frutas y verduras destacan por ser fuentes ricas en vitaminas y fibra y consumir una variedad diaria de estos alimentos prácticamente asegura las cantidades que necesitamos de estos componentes. Por ejemplo, una ingesta pequeña diaria de naranja o kiwi cubre nuestros requerimientos diarios de vitamina C, y un plato de lentejas con arroz ofrece una aporte adecuado de hidratos de carbono, proteínas y fibra, con muy poca grasa. Si lo acompañamos con una ensalada vegetal, obtendremos un suplemento de vitaminas y minerales.

Otra ventaja de las frutas y verduras es el ahorro de tiempo en la cocina que puede suponer frente a un plato elaborado. Comer una o varias piezas de fruta requiere únicamente lavarlas o pelarlas, y la realización de una ensalada supone muy pocos minutos y cumple perfectamente como primer plato en la comida o una estupenda cena. Esta sí debería ser la verdadera comida rápida tanto si no disponemos de suficiente tiempo para cocinar como si queremos llevar una alimentación saludable.

EL MEJOR MOMENTO PARA COMER FRUTA

Lo que dicen:

Sobre el momento para consumir la fruta hay varias y dispares opiniones. Algunos dicen que es bueno comerlo antes del primer plato porque produce una saciedad que hará que comamos menos posteriormente, con la ventaja que eso conlleva en dietas de adelgazamiento. También, dicen, es recomendable comer fruta antes y no como postre porque su tiempo de digestión es muy corto, y si se toma después de haber comido se producirá la digestión de la fruta simultáneamente con los otros alimentos pero en un espacio de tiempo más breve, provocando una fermentación que podría causar gases o cierto malestar en el estómago.

Otras teorías hablan de que es indiferente el momento para comer frutas y que no fermenta en el estómago, de modo que puede servir de postre como es costumbre, sin ningún problema.

No he encontrado un consenso sobre el tema o un estudio científico que determine si realmente existe algún momento idóneo para comer la fruta, y esto hace que me plantee la cuestión de por qué se habla sobre ello. El asunto es  curioso, ya que no se discute, por ejemplo, sobre el mejor momento del día para comer carne, pescado, un bocadillo de garbanzos o palomitas de maíz.

No cabe duda de que la fruta a nivel dietético da mucho juego, y las hipótesis sobre el momento de su consumo circulan desde hace años marcadas por la discrepancia. Que si han de comerse con el estómago vacío o antes de la comida porque su digestión es inmediata, hasta que su digestión es larga y fermenta en el estómago si la tomamos como postre. Que si engorda más o menos dependiendo de cuando se toma o pierde sus propiedades según a qué otros alimentos acompañe en la digestión. Demasiadas contradicciones y un jaleo total. Así que hablaré de mi experiencia y lo que opino al respecto.

Lo que opino:

Según un profesor de yoga que tuve, debe comerse primero la fruta porque aumenta el apetito y, en general, han de consumirse siempre antes los alimentos crudos que los cocinados. Cuando yo como fruta antes del primer plato, aunque es cierto que me sacia, paradójicamente también me abre el apetito; aunque después no me apetece tanta cantidad de comida como si no hubiera comido la fruta. Por otro lado, suele gustarme más comerla de postre, y ahora mismo no recuerdo que me haya hecho daño alguna vez. Personalmente, como fruta sencillamente cuando me apetece y eso suele ocurrir más a menudo a media mañana.

Otro momento en que me sentaba estupendamente comer fruta era justo antes de ir al gimnasio, sobretodo plátanos. Me daba energía y no tenía ninguna molestia al entrenar. Igualmente, al venir del entrenamiento, la fruta  -sobretodo en batido- era un reconstituyente ideal. Creo que al final se trata de que cada uno la coma cuando más le apetezca y le siente mejor.

Come frutas, verduras y legumbres cuando quieras, pero cómelas. Además de estar riquísimas contribuyen a tener buena salud.

Recomendado para todos.

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